El dos de octubre de 1936, nace en un pueblecito de Ciudad Real, Brazatortas, Antonio Ángel Custodio Gala y Velasco, poeta, novelista y escritor que ha conocido en los últimos años un reconocimiento unánime de público y de crítica. Hizo estudios primarios y bachiller en La Salle de Córdoba regentado por los hermanos maristas. Fue un escritor precoz. A los cinco años escribió un relato corto y a los siete una obra teatral que se perdió entre sus recuerdos infantiles.
A los catorce da una conferencia en el Círculo de la Amistad, de la ciudad que le vio crecer, que se convierte en todo un suceso. Al año siguiente, 1951, con tan solo quince ingresa en la Universidad. Estudia en Sevilla los cursos de la licenciatura de Derecho, y se matricula por libre en Madrid en otras dos carreras: Filosofía y Letras, en la rama de Historia y Ciencias Políticas y Económicas. Durante sus años universitarios publica sus primeros poemas en las revistas de la época: Escorial, Platero, Cántico... También funda dos revistas: Aljibe, con algunos compañeros de la Universidad de Sevilla y Arquero de Poesía, con Gloria Fuertes y Julio Mariscal Montes.
En 1957, se instala en Madrid. Tiene tres licenciaturas y obedeciendo el mandato de su padre, Luis Gala Calvo, comienza a preparar los ejercicios para abogado del Estado. Sin embargo, decide abandonar las oposiciones y se traslada a la Cartuja de nuestra Señora de la Defensión de Jerez de la Frontera. Tras una breve estancia en Córdoba vuelve a Madrid y en diciembre de 1959 recibe un Accésit en el premio Adonais de Poesía por su libro Enemigo Íntimo. Sus primeros años en Madrid fueron duros. Tuvo que trabajar como peón de albañil, repartidor de pan, dar clases en algunos colegios..., hasta que a mediados de 1962 se marcha a Italia, instalandose en Florencia, donde permanece casi un año. En este tiempo publica en los Cuadernos Hispanoamericanos poemas de su libro La Deshonra.
En la primavera de 1963, ya de regreso a España, recibe el premio Las Albinas, por su relato Solsticio de Verano. En julio le es concedido el Premio Nacional Calderón de la Barca por su comedia Los Verdes Campos del Edén, que se estrena el veinte de diciembre en el María Guerrero, dirigida por José Luis Alonso. En estas mismas representaciones conoce a R.M con quien compartiría diez años de su vida: “Fue un amor definitivo. Fue una cosa completamente maravillosa. Durante un tiempo fui completamente feliz y absolutamente desgraciado al mismo tiempo”. Con esta comedia obtiene el Premio Ciudad de Barcelona. En 1965 aparecen algunos poemas en Los Cuadernos Hispanoamericanos, de su libro Meditación de Queronea. Al año siguiente, mutilada por la censura, se estrena en el María Guerrero El sol en el Hormigero. A los pocos días es retirada por las autoridades gubernativas, ante las manifestaciones de entusiasmo del público universitario. Acepta un curso de conferencias en varias universidades norteamericanas y al volver estrena en el teatro Arlequín de Madrid Noviembre y un poco de Hierba. A los quince días tiene que retirarse de cartel por la ausencia de público: “Es una comedia sobre heridas de guerra que, en su momento, los españoles aún non estaban dispuestos a contemplar”,
En 1968 estrena en Televisión Española, las adaptaciones de Shakespeare: El rey Lear, Ricardo III y Romeo y Julieta. De Molière: El burgués gentil hombre y de Eurípides: Las Troyanas. También trabaja como guionista de películas, como es el caso de Digan lo que digan interpretada por Raphael y Esa Mujer, por Sara Montiel, ambas dirigidas por Mario Camus.
Dos años más tarde comienza a escribir otra serie de guiones para Televisión Española, Las Tentaciones. Y en 1972, Si las piedras hablaran. El 10 de Octubre de ese mismo año se estrena en el Teatro Lara de Madrid, Los buenos días perdidos, que obtendría más de mil representaciones y recibiría los más importantes galardones y premios de teatro de España, entre los que cabe destacar el Premio Nacional de Teatro y el Premio Mayte. Con esta obra comenzaría su colaboración con la productora de teatro, Corral de Comedias, del matrimonio Rosa y Antonio Redondo.
Será en 1973 durante su convalecencia por una grave enfermedad, en la que estuvo al borde de la muerte, cuando comience a usar uno de sus signos característicos: el bastón. En Septiembre es prohibida su comedia ¡Suerte, campeón!, que estaba apunto de ser estrenada. El 28 de este mes después de superar algunos problemas de censura, se estrena en el Teatro Eslava, Anillos para una Dama, que sería su comedia más representada y la que más premios ha obtenido tanto en España, como fuera de ella.
Dos años más tarde vuelve a tener problemas con la crítica que censura su obra ¿Por qué corres, Ulises?, sin embargo el público la apoyaría llegando a más de seiscientas representaciones. En este momento Gala declara que abandona el Teatro: “Nunca me he sentido teatrero. Quizá sea el único reproche que me puede hacer a mí, la gente del teatro. Yo amo el teatro, admiro el teatro, he leído mucho teatro, tengo admiraciones grandísimas por muchas actrices, he admirado a algún actor, pero no me he sentido nunca un hombre de teatro, porque tengo mi propia vida y lo que soy sobre todo, y ante todo, es un escritor, más todavía, si se me presionase te diría que lo que soy sobre todo es un poeta.”
En 1976 empiezan los problemas judiciales por sus trabajos periodísticos. La serie Paisaje con Figuras, es suspendida por orden del Presidente Arias Navarro. En este mismo año, recibe el Premio de Periodismo González Ruano, por el artículo Los ojos de Troylo. Dos años después comienza a publicar semanalmente en el diario El País. La primera serie se llamará Verbo Transitivo. Al año siguiente, 1979, comienza la sección Charlas con Troylo, en ellas Gala cuenta a su perro todo lo que le pasa a España y a España todo lo que le sucede a su perro, y a los dos lo que le sucede a su corazón. Por primera vez escribe el Mensaje del Día Mundial del Teatro y se produce, a pesar de lo anunciado su vuelta al escenario, con Petra Regalada. En 1981 es nombrado presidente de la Asociación de Amistad Hispano-Árabe y en 1982 recibe el doctorado Honoris Causa por su Universidad, la de Córdoba.
Comenzará la serie de Cuaderno de la Dama de Otoño en el diario El País en 1983. Además obtiene el nombramiento de Andaluz Universal otorgado por la Junta de Andalucía, y en Diciembre en el María Guerrero se celebran sus veinte años con el Teatro, y la presentación del libro Trilogía de la Libertad, que contiene sus tres últimas comedias. En 1985 se le abre un proceso por el Tribunal de Justicia Militar por su artículo Soldadito Español y se estrena la comedia Samarkanda, dirigida por María Ruíz, que trata el tema de la homosexualidad.
Participa en 1986, en la campaña contra el ingreso de España en la OTAN, muy activamente, solicitando el NO en el referendum, puesto que es el presidente de la Plataforma Cívica por la salida de nuestro país de la Organización del Tratado del Atlántico Norte. Al año siguiente estrena su nueva obra Séneca o el beneficio de la duda, en la que colabora con Manuel Collado. En 1989 se estrena en el Teatro Liceo de Barcelona la ópera Colón, con libreto de Antonio Gala y música de Leonardo Balada. En Octubre recibe el Premio León Felipe a los valores cívicos. En 1990 le es concedido el Premio Planeta por su novela El Manuscrito Carmesí. En 1993 se publica su segunda novela La Pasión Turca. En el mes de Mayo, se presenta una recopilación de sus textos sobre el amor, con el nombre de El Águila Bicéfala, y aparecen en la Feria del Libro como los más vendidos. En Diciembre aparece una nueva edición de Charlas con Troylo, en donde escribe una carta a su viejo compañero interlocutor: “Hemos pasado mucho tiempo sin vernos, Troylo, demasiado tiempo. Miraba distraído hacia otro lado, me descuide, y te fuiste. No quiero recordar como te fuiste. Quiero recordarte impetuoso y jubiloso, remanso menudo de la vida, compañero mío, secretario mío, llavero de mis caricias compartidas.”
En 1994 el Ministerio de Cultura publica los nombres de los autores más vendidos en el año anterior; Antonio Gala aparece en primero y en segundo lugar, con sus respectivos libros, La Pasión Turca y El Águila Bicéfala. Desde entonces sigue a la cabeza de los autores españoles más leídos, con títulos como Más allá del jardín (novela) o Poemas de Amor. Este año reaparece con “El Corazón Tardío”, que fue acogido con entusiasmo por el público: pues, sólo en el primer mes de venta (abril) se han realizado 10 ediciones.
La obra teatral de Gala, a pesar de que él no es un hombre de teatro, es muy amplia y ha gozado más de los favores del público que de una parte de la crítica. Esto se debe a la dificultad de clasificar su teatro: no hay en el solo una crítica social, ni tampoco trata de complacer a la burguesía acomodaticia, sino que construye una obra lírica y épica, con una gran carga alegórica para que el público establezca las conexiones con la realidad más próxima o lejana que su imaginación le permita.
Toda la trayectoria de Gala está marcada por temas de tipo histórico, que utiliza más para iluminar el presente que para ahondar en el pasado.
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Entrevista a Antonio Gala:
Siempre es una suerte poder escuchar a Antonio Gala y conversar con él. Primero por su obligada y no desmentida inaccesibilidad; también por su sabiduría, mezcla y reciclaje permanente de las filosofías orientales y occidentales; y quizá, sobre todo, porque es muy difícil que, en algún momento y en medio de la conversación más serena, él nos rompa alguno de nuestros esquemas: a veces, sus palabras son como levadura en la masa, rompedoras y necesarias. Verdemente tuvo esa suerte, por confesarse Antonio Gala en consonancia con la temática de nuestra revista. Le agradecemos aquí su amable acogida.
Verdemente. ¿Sabes que tienes fama de inaccesible?
Antonio Gala. Porque lo soy, porque si estuviese dando entrevistas todo el tiempo o poniéndome al teléfono, no podría hacer otra cosa que ponerme al teléfono, hacer entrevistas, poner prólogos y presentar pintores en exposiciones.
En el número 11 de Verdemente a algunos colegas tuyos les hicimos 3 preguntas:
A–¿Qué es para tí escribir?
B– ¿Qué es un escritor?
C–¿Qué es una página en blanco?
A– Escribir para mí es respirar, escribir es mi forma de hablar, de cantar, de emocionarme, de vivir en definitiva. De alguna manera, me moriría si no pudiera escribir.
B– Un escritor, pues es un tonto. si un hijo mio me dijera que quiere ser escritor, lo estrangularía, y si sobrevivía al estrangulamiento, le pondría a estudiar muchas carreras, como yo estudié, para prepararse, prepararse y prepararse; y luego ya si su destino era ese, pues que íbamos a hacer. Pero me parece un destino molesto y modesto, con una modesta resonancia social.
C– La página en blanco para mí es un desierto terrible, por eso escribo en papeles usados por el otro lado para tener la sensación de no estar quebrantando ni manchando nada que no estuviera manchado. Y eso del destino modesto con poca resonancia... Tenemos muy poca influencia. ¿Qué importa que de una novela como esta (La regla de tres) se hayan publicado 175.000 ejemplares? ¿Qué es eso comparado con el gran mundo? No tenemos que estar orgullosos por haber nacido escritores. Tenemos que escribir lo mejor posible, y nada más.
¿Es verdad que te obligó tu padre a estudiar tres carreras?
Tenía un padre que quería que tuviese un futuro más seguro que el de escribir; y así fuí todo lo que él quiso que fuese, y luego, cuando ya pude, elegí definitivamente.
¿Qué importancia tiene el éxito?
El acto de la creación en sí, es tan doloroso y tan gozoso al mismo tiempo, que a mí no me extraña que se compare con un parto. Es solitario como un parto, y doloroso y gozoso como un parto. Luego lo que venga después no sabemos. Es como un niño, no sabemos si va a ser un éxito o un fracaso. Pero el hecho de haberlo tenido ya lleva su propio gozo.
Entonces ¿piensas que la fama no sirve para nada?
¿Qué es la fama? La fama es la gloria en calderilla. La fama es algo que te impide ver, de la mano de alguien que quieres. un atardecer bonito... se paga un precio muy alto por ella. Para algunas cosas sí sirve: Has sido uno de los primeros en firmar el manifiesto del 0,7% A ellos, si les importa que dicho manifiesto lo firmen famosos como tú Claro que sí. El escritor puede meterse en su torre de marfil, de acero, o de plástico, a escribir sobre su obra y es una postura respetable. Yo no puedo tenerla. Me parece que yo estoy asomado permanentemente y estoy viviendo lo que viven a mi alrededor. No en vano me llaman el solitario-solidario, me parece que firmo todos esos manifiestos y desde la tronera del mundo estoy fustigando y exigiendo a los políticos que se comporten como tales y administren de una manera natural y honrada los bienes que les hemos entregado y se comporten como servidores nuestros. Me costaría mucho trabajo dejar de hacerlo.
Y lo llamas solidaridad o puede tener otros nombres?
Es algo más, es fraternidad. La palabra solidaridad se emplea tanto y en tantas ocasiones con tanto desdén y sosería que verdaderamente no significa ya lo que significaba. El hecho de solidificarse uno con otro, de hermanarse, de confundirse de, "sentirse con", me parece muy importante. Me parece que si no el escritor en soledad absoluta no escribiría. No creo en los diarios íntimos que se escriben para guardarlos en los cajones. Siempre escribimos para ser leídos y por tanto siempre tenemos que contar con el lector.
Hacer una entrevista a Antonio gala es fácil y difícil. ¿Qué le preguntarías tú a Antonio Gala?
Le preguntaría por qué ha renunciado a la felicidad. No lo sé del todo, quizá porque la felicidad me perturbaba. Quizá porque darme cuenta de que tenía la felicidad en las manos, me preocupaba tanto que no podía comer, ni dormir, entonces preferí tirar a la felicidad por la ventana y quedarme de una vez tranquilo. He sustituido la felicidad por la serenidad.
Una frase suya dice que sólo se aprende con el dolor ¿Eres un hombre muy aprendido?
Creo que sí, aunque no siempre estuve solo, no siempre estuve doloroso. Pero me parece que el dolor es un gran maestro, enseña más que la felicidad. La felicidad es más egoísta. Por supuesto un dolor bien digerido. porque un sentimiento, si no se hace la digestión de él, se transforma en resentimiento. Y eso es malo. pero el dolor bien digerido nos hace crecer. Nos hace más comprensivos y más grandes.
¿Qué tiene que ver el amor con la soledad?
En principio podría pensarse que son conceptos opuestos, pero yo no lo creo así. El amor cuando vive y se siente uno solo, es el más desdichado de los estados. Yo recibo alrededor de 120 cartas diarias y un 30% es de gente que se siente sola. Si la soledad manchará, creo que no habría agua bastante para lavar la mancha de la soledad.
Tus artículos suenan a veces como una arenga a los jóvenes.
Es cierto, he escrito una sección entera durante 2 años, ya se ha publicado y ha aparecido en un libro que se llama "Carta a los herederos", y es el best-seller en Hungría, no se sabe porqué. La juventud se parece mucho en todas partes. Y muchas veces ha sido una arenga contra lo establecido, una arenga para invitar a la rebeldía, no sé si con éxito o sin éxito.
¿Esto es cómo una especie de "obligación" hacia las nuevas generaciones?
Me interesa mucho el mundo pero sobre todo me interesa que va a ser del mundo que estamos viendo.Lo que va a ser, va a ser lo que sean los herederos. Los herederos lo tienen todo en sus manos, a ellos les parecerá que no heredan nada, pero precisamente es una forma de heredar. Siempre he invitado a los jóvenes a que si no les gusta la decoración de la casa en que viven, empiecen ya a tirar los cuadros por la ventana.
¿Ser filósofo y escritor son cosas diferentes?
No. Hay escritores que escriben de una manera más epidérmica, bella pero más superficial, y hay escritores que calan más hondo. Y me parece que el escritor más verdadero es el que tiene una concepción personal del mundo. Y para eso sí hay que tener un poco de filósofo.
¿Qué tienen tus personajes de tí?
A mi me parece que todo lo que se escribe es un poco autobiográfico, lo que sucede es que no sólo está lo que nosotros hemos vivido. Está lo que estamos contemplando, la vida de los demás, lo que de alguna manera uno ha presenciado. De mi hay personajes que tienen mucho p. ej. Octavio Lerma, el Boabdil, el Séneca,.. pero no se puede decir que sea del todo autobiográfico.
¿Cuál es la regla de tres en el amor?
Es un título que está antes incluso que la novela. Era el intento de compartir el amor con una pareja ya establecida. Me parece que el número de tres, en el amor y en la vida, es un número mágico. Era un ensayo de cómo el amor cabía entre tres en vez de a dos. Pero La regla de tres es aparentemente una regla sencilla, porque si se multiplica, luego hay que estar dispuesto a dividir.
¿Tú crees que el amor ha de romper con esquemas establecidos?
El amor es una reacción antigregaria y el sexo también. La sociedad cree que ordena todo, cree que está todo establecido para que la pareja se una y tenga sus crías y las cuide, y eso no es así. El amor se ha refugiado en la penumbra, en la intimidad, la sociedad no tiene que ver con él. El amor es un fenómeno intransferible, absolutamente íntimo y por lo tanto contradictorio de la sociedad, no va contra ella pero sí al margen de ella.
Has escrito novela, ensayo, teatro, poesía, artículos, has llevado novelas al cine. ¿Te queda algo por hacer?
Pues seguir avanzando en todos los caminos. Porque la vida no me dio opción, me dijo tienes que escribir; a cambio de eso me dio la posibilidad de escribir en todos los géneros literarios. Pero es ella la que manda. No me queda nada por inaugurar, pero me queda todo el camino, en todos los sentidos, por andar. Estoy pensando hacer una recopilación de poemas de amor y publicarlos, saldrá para primavera.
Dices que no pudiste elegir ¿Crees que es tu destino ser escritor?
Absolutamente comprobado. Por vocación, hubiese elegido otro oficio. Como es un destino procuro hacerlo bien, pero no podría dejar de hacerlo.
¿Qué significa ser ecologista?
Significa aceptar lo que soy, es decir que formo parte de una naturaleza y que si el hombre (que es un vanidoso) está en el último peldaño de la escala zoológica, no es para beneficiarse sino para administrar una casa que se ha encontrado y que debe dejar mejor de lo que la ha encontrado.
¿Qué nos dirías para el año que empieza?
Que cada uno sea más él; que se pregunte en esa puerta del 97 ¿quién soy? Se responda y que todo el año lo dedique a avanzar en ese camino de búsqueda y de hallazgo de sí mismo; y que no haya ni un solo minuto que esté vacío de ese afán.
¿Crees en la casualidad?
Creo en algo que nosotros llamamos azar. Pero que está todo preparado, por ejemplo, ese encontronazo del amor a primera vista, no es algo que suceda porque sí. Que nosotros hemos venido caminando hasta llegar a ese punto que está marcado con una crucecita y que la otra persona también va a llegar allí en un momento determinado; como la muerte, como todo lo importante, me parece que estamos siendo conducidos. Y lo importante es que nos dejemos conducir. Eso que nosotros llamamos "nuestra vida" no es verdad, nosotros somos de la vida. Si yo transmito la vida y lo que quiere la vida que yo transmita, entonces estaré cumpliendo mi deber. Es como quien se monta en un taxi y se pone muy pesado, diciéndole al conductor de la vida donde quiere ir. El "taxi" ya sabe donde llevarnos.
La grandeza de Antonio Gala
Por Enrique Cabrera Vásquez
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Nimbado por el aura mágica de sus palabras tiernas y sencillas, salidas de la profundidad de sus adentros; envuelto en el misterio cautivante de su figura carismatica, templada por la vasta concepción filosófica de la vida y de la muerte, nos vino la presencia solemne y gallarda; extraordinaria y majestuosa; infinita e inmensa, del gran Antonio Gala. Prolifero escritor y periodista, hombre de ideas y letras universales. Español y del mundo. Pluralizado y exclusivo; para arroparnos con sus aterciopeladas palabras, hirsutas y sinceras, sin de menos y sin demas. Justa y precisas. Expresada con magistral elegancia; con suma teatralidad dramaturga. Con sencillez hinóptica, con fluidez y soltura subgestiva. Adueñándose del escenario, del auditorio, que quedó anonadado ante el peso moral y espiritual de este solitario hombre que pulvoriza conceptos falsos y estridentes. Que tremolea sin inmutarse la reciadumbre de su enjunta figura. En cada gesto y ademanes; en cada movimiento estilístico con que le imprime fuerza a la entonación melodiosa de su discurso –conferencia, fascinante acentúa la veneración espontánea e instantánea de un público harto de escuchar charles y conferencias cargadas de estereotípos rutinarios, flematicos, gastados por su manoseo y contaminados por su impureza. Frente a él, no hay escape posible, no hay desvaríos fantasiosos ni aburrimiento. El orden de su palabra, la elegancia de su discurso concluyen en un éxtasis de recogimiento y respeto. Hasta el aplaudirlo perturba.
El es la palabra encantada que al escuchar ( desde la primera vez) no queremos que se nos escape; que cese ese ( su) aluvión de pristinas ideas, puras y sinceras. Tan fuera de lo ordinario, de lo común; libre de las ataduras ideológicas y de los apremios políticos. Sólo él puede estar por encima de los Sistemas y de los Estados. De los gobiernos y de los gobernados. Es la expresión gallarda, orgullosa, soberbia, presuntuosa, arrogante y hasta jactaciosa ( a él le cabe y le luce), que se subleva contra los convencionalismos automatizantes que nos atrofian y limitan. Así es la recia personalidad y el hombre social, Antonio Gala. Ese que nos trajo el Seminario Internacional de Comunicación de CODETEL, celebrado del 20 al 24 de febrero, y que concluyó con su portentosa Conferencia de clausura. Ese que nos trajo todo un infinito mensaje real y claro conjugado en el peculiar título , "El mito de la libertad", Por eso nos conceptualizó con honestida, sin ambage ni miramiento, "el hombre no tiene libertad auténtica".
En efecto, Antonio Gala dictó una impresionate Conferencia con el tema "El mito de la libertad", en el referido Seminario dedicado a Don Rafael Herrera.
En ella afirmó la carencia de libertad en el hombre, su condición de sometido a valores y patrones falsos e irresponsables.
"No somos más que seres intercambiables galopando hacia la frustración y la locura", dijo.
Este apasionado cultor de la soledad nos denuncia con crudeza filosófica los andamiajes intrínsecos que se dan en la multimillonaria publicidad y propaganda comercial y política, que nos aleja de la real libertad y nos convierte en seres idiotizados, engreidos, vanidosos, fastuosos, ridículos, rindiéndoles culto al consumismo y al morbo. Seres atrapados por "frases, pensamientos y opiniones pre-fabricadas".
Sólo un alto intelectual con vasta errudiccón teórica y conceptual, con criterios firmes. Filosofo y humanista como Antonio Gala, podía transmitirnos esta verdad tan celosamente ocultada por argumentos tejidos interesadamente por quienes se han propuestos "descerebrarnos".
Gala no es un improvisado. No es un visionario fanatizado catapultador de sacrificios y acciones heróica. Su vuelo ha sido dialéctico; es la resultante de un intrincado proceso caustico y reflexivo. Raúl del Pozo nos dice de él que le enseñó a España a ponerse los pantalones. "Es Antonio Gala, la moneda de un dios arrogante con dos caras, una oculta, pesimista, que dice "no". No a la OTAN, no a la video-guerra, no a la corrupción. Hay otro Gala, anarquista comprensivo, que dice "si"al amor y a la libertad, con un estilo lírico, Juan-romoniano de sensibilidad latina y andaluza".
"El narrador poeta, dramaturgo, conferenciante, de conciencia moral muy despierta, cuando comenta la política es burlesco, gallardo, cáustico. Cuando trata de los sentimientos y de los paisajes, la melancolía o la muerte, lo hace con precisión del hombre que ha vivido todas las pasiones. Pero en los dos Galas, en el agitador y en el poeta, encontramos sobre todo esa belleza conmovedora, que ha sabido conectar con la sensibilidad contemporánea que lo ha erigido como ídolo…"
Así, a groso modo, nos describe Pozo a este formidable pensador español y universal nacido el 2 de octubre de 1936. Licenciado en Filosofía y Letras, Derecho y Ciencia Políticas y Económicas. Con gran vocación cultural y literaria, que ha cultivado todos los géneros literarios: ensayo, novela, poesía, teatro, periodismo, conferencia, guión televisado y cinematográfico.
Autor de Enemigo Intimo (1963), Los Verdes Campos de Eden ( 1963), ganador del Premio Nacional de Teatro, Soneto de la Zubia, Testamento Solsticio de Invierno, Si los Padres Hablaran, Anillos para una Dama ( 1973); Las Citaras Colgadas de los Arboles ( 1974); por Qué Corre Ulises? ( 1975); Petra Ragalada ( 1980); Carmen Carmen, musical estrenado en 1968, etc. Se le debe también el libreto de la ópera Cristobal Colón y adaptaciones teatrales de Claudel, Albee y Ocasey. Sus obras han sido traducidas a las lenguas más importantes. Con su primera novela, El manuscrito Carmesí, ha obtenido el Premio Planeta 1990.
El Gala humanista y poeta más que comprender al género lo evalua; trata de rescatarlo del vórtice de la tecnología nociba e inhumana. Lo reconoce como un todo particular y general, con sus alti-bajas y proceso de etapa en la vida "la más solitaria", "en que es pura esperanza o pura desesperación". En el alto vuelo de su palabra, de su mensaje gratificante que reconforta y reenvindica las ansias libertarias del hombre, nos traza las pautas de la autentica liberación . Esa que no es cupón ni trama . Nos orienta hacia la vía de la salvación, de la "libertad auténtica", la que debe apoyarse en la "personalidad verdadera e irrepetible en cada ser humano".
Nos plantea que el hombre se reencontrará consigo mismo y con la Naturaleza en cuanto Naturaleza deba ser obedecida y no aniquilada. "De esta forma el trabajo se convirtiría en un acto de creación, no en un castigo", dice.
"De esta forma, el amor llegará a ser lo que es: una unión con el otro, una afirmación del otro en uno y viceversa, no en una eliminación de nuestros nombres personales, sino en una captación de ellos".Es esta la síntesis meridiana, sucinta y elocuente de su magno pensamiento poético, filosófico y humanista.
Gala viene a ser el reverso de Krishnamurti, ese otro estupendo pensador espiritual y humanistico que nos diferencia claramente la verdad de la realidad, y nos enrrumba por la delicada pendiente de la reflexión y la meditación, para que procuremos la autoliberación autentica frente a una realidad social traumatizante y contaminada por la descomposición.
Y es que la privilegiada condición de poeta de Gala, le permite ese nivel úunico de superioridad humana, le permite ser dios para encontrarse con el autentico Dios . El desmitificado de los dogmas mitológicos y los ritos estúpidos como absurdos. El Dios libre de contaminación y de ataduras espúreas. El que nos brinda la autentica libertad , surgida del rescate de nuestra voluntad . De la justipreciación de nuestra peculiar condición humana . La que nos separa diametralmente de las ideologías fosilizadas; de los tabues anquilosantes. En encuentro del camino que nos matrimonia aceradamente con la Naturaleza, la única madre de todas las creaciones . He aqui la profundidad de la impronta de Gala . El vuelo indetenible de su infinito pensamiento.
Con Krishnamurdi aprendimos que además de los principios activos del hombre como el temor y el placer, existe el del sufrimiento. Y con Gala podemos objetivizar que lalibertad que nos viene de afuerra , no de nuestra intimidad reflexiva , es un mito. Una prisión. "Y que cuando mayor sea la pérdida de identidad, más profunda y más honda será la exigencia de servidumbre. Porque el hombre actual se pregunta, si no soy lo que los otros piensan, que seré ?. Nadie, nada"
He aqui su anatema cautivante contra la inversión humana y social. El sello gomígrafo de su mensaje revolucionario y subversivo, que se enfrenta a la ideología de la mediocridad, del miedo y los dogmas. Al conservadurismo clerical y religioso y al radicalismo insensato y fascista. Al socialismo caricaturesco y desalmado y al capitalismo inhumano e individualista. Al colectivismo forzado y a la violencia irreflexiva y emocional. Gala, el inmenso Gala, apóstol de la libertad, esa que ha sido malograda en los foros internacionales rindiéndoles culto a los egos torcidos de la bestialidad humana. Con Gala negamos los insípidos criterios conceptuales carcomidos por la barbarie. Con claridad, valentía y seguridad nos orienta para que tremoleemos nuestra voluntad adormecida, indecisa y vacilante. "Para que trabaje y se instale libremente en la vida y produzca su beneficios".
Cual cirujano introduce el bisturi en la profundidad del sentimiento personal para extirpar el cáncer expresado en la falsa libertad; la impuesta por las bayonetas y las bombas. La construida en hoteles de lujos y brindis públicitados. Nos predica la autentica libertad: la que debe surgir de la emancipación de nuestro interior; de nuestra propia liberación espiritual; la que debe surgir del amor por la humanidad y por la madre Naturaleza. Con él iniciamos el camino para procurarnos un auténtico camino luminoso, negando la libertad surgida de los genocidios y los holocaustos. Esa que nos proporciona esta bárbara sociedad conducida por orangutanes.
La exposición clara de su palabra hecha conferencia eletrizó a todo el gran auditorio que nos dimos cita en el confortable y amplio salón Anacaona del Hotel Jaragua, en Santo Domingo, convidados por el Seminario Periodistico Internacional de CODETEL. Y no era para menos; virtió su palabra sin ningún desperdicio propia de un hombre de dimensiones cósmicas, como él. Caló y penetró el hondón del alma humana. Soliviantó nuestra conciencia adormecida y endrogada por los invertidos mensajes pre-fabricados por los actuales regentes del mundo. Su palabra nos estimula a luchar contra el odio y la deshumana competencia consumista. Gala no es un nuevo Mesías, pero si el portador de un rectílineo mensaje crítico , hermoso y dulce que nos llena de satisfación humana. En él se manifiesta una propuesta clara y profunda de libertad y de amor. Es la voz apasionada de un heraldo iluminado que carga con vehemencia contra el muro de la obscuridad para que resplandesca la luz: para que se abra paso la esperanza . Y habrá libertad sin cadenas ni condiciones : sin convencionalismos ni cumplidos hipócritas. Sin precios en oro ni especies materiales. Sólo conquistada con la práctica de la moral y de la decencia. Con el respeto por la condición humana. Esa libertad de la que nos habla Gala surgirá para quedarse siempre. Así será. Así lo desea la humanidad.
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ANTONIO GALA: '' HE APRENDIDO MÁS DEL DESAMOR QUE DEL AMOR Y ESO NO ES MALA COSA''
Periodista:- Una de las constantes de las novelas de Antonio Gala es la invitación a ‘salir del jardín’, ¿seguimos encontrando esa invitación en Los invitados al jardín?
ANTONIO GALA.- En Más allá del jardín, Desideria en La pasión turca , en El manuscrito carmesí, la persona es más real cuando sale de su jardín. Ahora, cuando invito al jardín, no invito al jardín de cada persona, sino al jardín común que es el jardín del amor, de la alegría, de la vida, de la felicidad, en ese jardín estamos invitados, no somos propietarios, quien tenga un jardín propio debe salir de él. A ese jardín del que hablo ahora hay que venir y hay que cuidarlo para que esté en flor el mayor tiempo posible, pues no duramos demasiado tiempo dentro de él.
T.- Me ha impactado la intensidad de las situaciones, la capacidad de ponerse en la piel del otro, de mostrar los sentimiento en tan pocas páginas, ¿estamos ante su obra más fresca, más cercana, más auténtica y más intensa?
A.G.- Mi tradición era escribir teatro. Mis personajes los conocía haciendo cosas que luego no hacían en escena como cortándose las uñas, gruñendo a la mujer o a la criada, siendo antipáticos cuando luego en la obra iban a ser otra cosa. Cuando aparecían en escena les dejaba hablar pues los conocía perfectamente y yo ‘hablaba por boca de ganso’. Aquí hay monólogos, por ejemplo en La penúltima, es la historia de un cura rural, enamorado de su profesión, yo sabía como él era, le puse en una situación y él habló. En ese momento yo me aparto y esa es una de las satisfacciones más grandes que da la creación, y que nada puede ya quitarme.
P.- ¿Por qué ha adoptado el formato de relato en lugar de la novela, su género más habitual desde que en 1990 apareciera El manuscrito carmesí? ¿Es un formato que se adecua mejor a los tiempos de prisas en los que vivimos?
A.G.- El relato es más legible, una historia relativamente corta se lee mejor que una novela larga de las escritas en el siglo XIX, cuando se tenía más tiempo para leer. En este momento la gente lee poco y lee deprisa. Lee en los medios de comunicación, entre viaje y viaje, lee en el avión. Creo que la historia corta es más adaptada y más feliz para esta época. Además mi colaboración diaria en un periódico es siempre muy minúscula, y me ha hecho aprender la síntesis y la sinopsis, las cosas que pueden ser dichas en menos palabras deben decirse con las palabras necesarias y nada más.
P.- ¿Cómo se ha encontrado Antonio Gala escribiendo en este formato?
A.G.- Al cambiar el formato la expresión se ha hecho más sólida, más joven, más rápida, más compañera. Estoy muy contento de este libro, no por el éxito que vaya a tener, pues es algo en lo que no pienso, sino porque me ha proporcionado una gran satisfacción mientras lo creaba.
P.- ¿Existe diferencia para Antonio Gala entre amor y enamoramiento?
A.G.- El amor significa una perduración, aunque luego no dure, pero nace para perdurar, el enamoramiento es una llamada de atención, de él puede nacer el amor, o no nacer, pues puede decaer pasados unos días y se olvida, palidece, y no cuaja en ese sentimiento grande, verdadero del amor.
P.- Los invitados al jardín se estructura como un gran puzzle, casi como un caleidoscopio de situaciones: el amor a destiempo en La Exposición, parejas aparentemente perfectas que se destruyen en Esa bonita pareja, el amor a un objeto en El último coche..., si en algo coinciden es en la tragedia. ¿Forman tragedia y amor un tandem inseparable?
A.G.- Son dos caras de la misma moneda, el amor es eterno mientras dura, pero el amor no dura siempre, como tampoco dura el jardín. Muchas veces los causantes de que no dure somos nosotros, otras veces son los otros, la otra parte de la pareja. Tendemos a mirarnos en el amado o en el amante como si fuera un espejo, pero para encontrar nuestro propio rostro. Esa falta de generosidad hace que el amor decaiga. Entonces viene no sé si la tragedia o la muerte, pero sí el desamor. Yo he aprendido mucho más del desamor que del amor, y eso no es mala cosa.
P.- Antonio Gala se enamora cada día de...
A.G.- Me enamoro casi continuamente de la luz, me ha dado por la luz, por los resbalones que la luz pega. Ahora que acabamos de adelantar esta hora y la luz dura más y toca las copas de los árboles, y nos pone fragante el mundo y llegan las tórtolas a Madrid, que por primera vez he escuchado en mi casa. Los invitados al jardín también son las tórtolas, las urracas, los mirlos, y entonces me enamora la naturaleza.
A los catorce da una conferencia en el Círculo de la Amistad, de la ciudad que le vio crecer, que se convierte en todo un suceso. Al año siguiente, 1951, con tan solo quince ingresa en la Universidad. Estudia en Sevilla los cursos de la licenciatura de Derecho, y se matricula por libre en Madrid en otras dos carreras: Filosofía y Letras, en la rama de Historia y Ciencias Políticas y Económicas. Durante sus años universitarios publica sus primeros poemas en las revistas de la época: Escorial, Platero, Cántico... También funda dos revistas: Aljibe, con algunos compañeros de la Universidad de Sevilla y Arquero de Poesía, con Gloria Fuertes y Julio Mariscal Montes.
En 1957, se instala en Madrid. Tiene tres licenciaturas y obedeciendo el mandato de su padre, Luis Gala Calvo, comienza a preparar los ejercicios para abogado del Estado. Sin embargo, decide abandonar las oposiciones y se traslada a la Cartuja de nuestra Señora de la Defensión de Jerez de la Frontera. Tras una breve estancia en Córdoba vuelve a Madrid y en diciembre de 1959 recibe un Accésit en el premio Adonais de Poesía por su libro Enemigo Íntimo. Sus primeros años en Madrid fueron duros. Tuvo que trabajar como peón de albañil, repartidor de pan, dar clases en algunos colegios..., hasta que a mediados de 1962 se marcha a Italia, instalandose en Florencia, donde permanece casi un año. En este tiempo publica en los Cuadernos Hispanoamericanos poemas de su libro La Deshonra.
En la primavera de 1963, ya de regreso a España, recibe el premio Las Albinas, por su relato Solsticio de Verano. En julio le es concedido el Premio Nacional Calderón de la Barca por su comedia Los Verdes Campos del Edén, que se estrena el veinte de diciembre en el María Guerrero, dirigida por José Luis Alonso. En estas mismas representaciones conoce a R.M con quien compartiría diez años de su vida: “Fue un amor definitivo. Fue una cosa completamente maravillosa. Durante un tiempo fui completamente feliz y absolutamente desgraciado al mismo tiempo”. Con esta comedia obtiene el Premio Ciudad de Barcelona. En 1965 aparecen algunos poemas en Los Cuadernos Hispanoamericanos, de su libro Meditación de Queronea. Al año siguiente, mutilada por la censura, se estrena en el María Guerrero El sol en el Hormigero. A los pocos días es retirada por las autoridades gubernativas, ante las manifestaciones de entusiasmo del público universitario. Acepta un curso de conferencias en varias universidades norteamericanas y al volver estrena en el teatro Arlequín de Madrid Noviembre y un poco de Hierba. A los quince días tiene que retirarse de cartel por la ausencia de público: “Es una comedia sobre heridas de guerra que, en su momento, los españoles aún non estaban dispuestos a contemplar”,
En 1968 estrena en Televisión Española, las adaptaciones de Shakespeare: El rey Lear, Ricardo III y Romeo y Julieta. De Molière: El burgués gentil hombre y de Eurípides: Las Troyanas. También trabaja como guionista de películas, como es el caso de Digan lo que digan interpretada por Raphael y Esa Mujer, por Sara Montiel, ambas dirigidas por Mario Camus.
Dos años más tarde comienza a escribir otra serie de guiones para Televisión Española, Las Tentaciones. Y en 1972, Si las piedras hablaran. El 10 de Octubre de ese mismo año se estrena en el Teatro Lara de Madrid, Los buenos días perdidos, que obtendría más de mil representaciones y recibiría los más importantes galardones y premios de teatro de España, entre los que cabe destacar el Premio Nacional de Teatro y el Premio Mayte. Con esta obra comenzaría su colaboración con la productora de teatro, Corral de Comedias, del matrimonio Rosa y Antonio Redondo.
Será en 1973 durante su convalecencia por una grave enfermedad, en la que estuvo al borde de la muerte, cuando comience a usar uno de sus signos característicos: el bastón. En Septiembre es prohibida su comedia ¡Suerte, campeón!, que estaba apunto de ser estrenada. El 28 de este mes después de superar algunos problemas de censura, se estrena en el Teatro Eslava, Anillos para una Dama, que sería su comedia más representada y la que más premios ha obtenido tanto en España, como fuera de ella.
Dos años más tarde vuelve a tener problemas con la crítica que censura su obra ¿Por qué corres, Ulises?, sin embargo el público la apoyaría llegando a más de seiscientas representaciones. En este momento Gala declara que abandona el Teatro: “Nunca me he sentido teatrero. Quizá sea el único reproche que me puede hacer a mí, la gente del teatro. Yo amo el teatro, admiro el teatro, he leído mucho teatro, tengo admiraciones grandísimas por muchas actrices, he admirado a algún actor, pero no me he sentido nunca un hombre de teatro, porque tengo mi propia vida y lo que soy sobre todo, y ante todo, es un escritor, más todavía, si se me presionase te diría que lo que soy sobre todo es un poeta.”
En 1976 empiezan los problemas judiciales por sus trabajos periodísticos. La serie Paisaje con Figuras, es suspendida por orden del Presidente Arias Navarro. En este mismo año, recibe el Premio de Periodismo González Ruano, por el artículo Los ojos de Troylo. Dos años después comienza a publicar semanalmente en el diario El País. La primera serie se llamará Verbo Transitivo. Al año siguiente, 1979, comienza la sección Charlas con Troylo, en ellas Gala cuenta a su perro todo lo que le pasa a España y a España todo lo que le sucede a su perro, y a los dos lo que le sucede a su corazón. Por primera vez escribe el Mensaje del Día Mundial del Teatro y se produce, a pesar de lo anunciado su vuelta al escenario, con Petra Regalada. En 1981 es nombrado presidente de la Asociación de Amistad Hispano-Árabe y en 1982 recibe el doctorado Honoris Causa por su Universidad, la de Córdoba.
Comenzará la serie de Cuaderno de la Dama de Otoño en el diario El País en 1983. Además obtiene el nombramiento de Andaluz Universal otorgado por la Junta de Andalucía, y en Diciembre en el María Guerrero se celebran sus veinte años con el Teatro, y la presentación del libro Trilogía de la Libertad, que contiene sus tres últimas comedias. En 1985 se le abre un proceso por el Tribunal de Justicia Militar por su artículo Soldadito Español y se estrena la comedia Samarkanda, dirigida por María Ruíz, que trata el tema de la homosexualidad.
Participa en 1986, en la campaña contra el ingreso de España en la OTAN, muy activamente, solicitando el NO en el referendum, puesto que es el presidente de la Plataforma Cívica por la salida de nuestro país de la Organización del Tratado del Atlántico Norte. Al año siguiente estrena su nueva obra Séneca o el beneficio de la duda, en la que colabora con Manuel Collado. En 1989 se estrena en el Teatro Liceo de Barcelona la ópera Colón, con libreto de Antonio Gala y música de Leonardo Balada. En Octubre recibe el Premio León Felipe a los valores cívicos. En 1990 le es concedido el Premio Planeta por su novela El Manuscrito Carmesí. En 1993 se publica su segunda novela La Pasión Turca. En el mes de Mayo, se presenta una recopilación de sus textos sobre el amor, con el nombre de El Águila Bicéfala, y aparecen en la Feria del Libro como los más vendidos. En Diciembre aparece una nueva edición de Charlas con Troylo, en donde escribe una carta a su viejo compañero interlocutor: “Hemos pasado mucho tiempo sin vernos, Troylo, demasiado tiempo. Miraba distraído hacia otro lado, me descuide, y te fuiste. No quiero recordar como te fuiste. Quiero recordarte impetuoso y jubiloso, remanso menudo de la vida, compañero mío, secretario mío, llavero de mis caricias compartidas.”
En 1994 el Ministerio de Cultura publica los nombres de los autores más vendidos en el año anterior; Antonio Gala aparece en primero y en segundo lugar, con sus respectivos libros, La Pasión Turca y El Águila Bicéfala. Desde entonces sigue a la cabeza de los autores españoles más leídos, con títulos como Más allá del jardín (novela) o Poemas de Amor. Este año reaparece con “El Corazón Tardío”, que fue acogido con entusiasmo por el público: pues, sólo en el primer mes de venta (abril) se han realizado 10 ediciones.
La obra teatral de Gala, a pesar de que él no es un hombre de teatro, es muy amplia y ha gozado más de los favores del público que de una parte de la crítica. Esto se debe a la dificultad de clasificar su teatro: no hay en el solo una crítica social, ni tampoco trata de complacer a la burguesía acomodaticia, sino que construye una obra lírica y épica, con una gran carga alegórica para que el público establezca las conexiones con la realidad más próxima o lejana que su imaginación le permita.
Toda la trayectoria de Gala está marcada por temas de tipo histórico, que utiliza más para iluminar el presente que para ahondar en el pasado.
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Entrevista a Antonio Gala:
Siempre es una suerte poder escuchar a Antonio Gala y conversar con él. Primero por su obligada y no desmentida inaccesibilidad; también por su sabiduría, mezcla y reciclaje permanente de las filosofías orientales y occidentales; y quizá, sobre todo, porque es muy difícil que, en algún momento y en medio de la conversación más serena, él nos rompa alguno de nuestros esquemas: a veces, sus palabras son como levadura en la masa, rompedoras y necesarias. Verdemente tuvo esa suerte, por confesarse Antonio Gala en consonancia con la temática de nuestra revista. Le agradecemos aquí su amable acogida.
Verdemente. ¿Sabes que tienes fama de inaccesible?
Antonio Gala. Porque lo soy, porque si estuviese dando entrevistas todo el tiempo o poniéndome al teléfono, no podría hacer otra cosa que ponerme al teléfono, hacer entrevistas, poner prólogos y presentar pintores en exposiciones.
En el número 11 de Verdemente a algunos colegas tuyos les hicimos 3 preguntas:
A–¿Qué es para tí escribir?
B– ¿Qué es un escritor?
C–¿Qué es una página en blanco?
A– Escribir para mí es respirar, escribir es mi forma de hablar, de cantar, de emocionarme, de vivir en definitiva. De alguna manera, me moriría si no pudiera escribir.
B– Un escritor, pues es un tonto. si un hijo mio me dijera que quiere ser escritor, lo estrangularía, y si sobrevivía al estrangulamiento, le pondría a estudiar muchas carreras, como yo estudié, para prepararse, prepararse y prepararse; y luego ya si su destino era ese, pues que íbamos a hacer. Pero me parece un destino molesto y modesto, con una modesta resonancia social.
C– La página en blanco para mí es un desierto terrible, por eso escribo en papeles usados por el otro lado para tener la sensación de no estar quebrantando ni manchando nada que no estuviera manchado. Y eso del destino modesto con poca resonancia... Tenemos muy poca influencia. ¿Qué importa que de una novela como esta (La regla de tres) se hayan publicado 175.000 ejemplares? ¿Qué es eso comparado con el gran mundo? No tenemos que estar orgullosos por haber nacido escritores. Tenemos que escribir lo mejor posible, y nada más.
¿Es verdad que te obligó tu padre a estudiar tres carreras?
Tenía un padre que quería que tuviese un futuro más seguro que el de escribir; y así fuí todo lo que él quiso que fuese, y luego, cuando ya pude, elegí definitivamente.
¿Qué importancia tiene el éxito?
El acto de la creación en sí, es tan doloroso y tan gozoso al mismo tiempo, que a mí no me extraña que se compare con un parto. Es solitario como un parto, y doloroso y gozoso como un parto. Luego lo que venga después no sabemos. Es como un niño, no sabemos si va a ser un éxito o un fracaso. Pero el hecho de haberlo tenido ya lleva su propio gozo.
Entonces ¿piensas que la fama no sirve para nada?
¿Qué es la fama? La fama es la gloria en calderilla. La fama es algo que te impide ver, de la mano de alguien que quieres. un atardecer bonito... se paga un precio muy alto por ella. Para algunas cosas sí sirve: Has sido uno de los primeros en firmar el manifiesto del 0,7% A ellos, si les importa que dicho manifiesto lo firmen famosos como tú Claro que sí. El escritor puede meterse en su torre de marfil, de acero, o de plástico, a escribir sobre su obra y es una postura respetable. Yo no puedo tenerla. Me parece que yo estoy asomado permanentemente y estoy viviendo lo que viven a mi alrededor. No en vano me llaman el solitario-solidario, me parece que firmo todos esos manifiestos y desde la tronera del mundo estoy fustigando y exigiendo a los políticos que se comporten como tales y administren de una manera natural y honrada los bienes que les hemos entregado y se comporten como servidores nuestros. Me costaría mucho trabajo dejar de hacerlo.
Y lo llamas solidaridad o puede tener otros nombres?
Es algo más, es fraternidad. La palabra solidaridad se emplea tanto y en tantas ocasiones con tanto desdén y sosería que verdaderamente no significa ya lo que significaba. El hecho de solidificarse uno con otro, de hermanarse, de confundirse de, "sentirse con", me parece muy importante. Me parece que si no el escritor en soledad absoluta no escribiría. No creo en los diarios íntimos que se escriben para guardarlos en los cajones. Siempre escribimos para ser leídos y por tanto siempre tenemos que contar con el lector.
Hacer una entrevista a Antonio gala es fácil y difícil. ¿Qué le preguntarías tú a Antonio Gala?
Le preguntaría por qué ha renunciado a la felicidad. No lo sé del todo, quizá porque la felicidad me perturbaba. Quizá porque darme cuenta de que tenía la felicidad en las manos, me preocupaba tanto que no podía comer, ni dormir, entonces preferí tirar a la felicidad por la ventana y quedarme de una vez tranquilo. He sustituido la felicidad por la serenidad.
Una frase suya dice que sólo se aprende con el dolor ¿Eres un hombre muy aprendido?
Creo que sí, aunque no siempre estuve solo, no siempre estuve doloroso. Pero me parece que el dolor es un gran maestro, enseña más que la felicidad. La felicidad es más egoísta. Por supuesto un dolor bien digerido. porque un sentimiento, si no se hace la digestión de él, se transforma en resentimiento. Y eso es malo. pero el dolor bien digerido nos hace crecer. Nos hace más comprensivos y más grandes.
¿Qué tiene que ver el amor con la soledad?
En principio podría pensarse que son conceptos opuestos, pero yo no lo creo así. El amor cuando vive y se siente uno solo, es el más desdichado de los estados. Yo recibo alrededor de 120 cartas diarias y un 30% es de gente que se siente sola. Si la soledad manchará, creo que no habría agua bastante para lavar la mancha de la soledad.
Tus artículos suenan a veces como una arenga a los jóvenes.
Es cierto, he escrito una sección entera durante 2 años, ya se ha publicado y ha aparecido en un libro que se llama "Carta a los herederos", y es el best-seller en Hungría, no se sabe porqué. La juventud se parece mucho en todas partes. Y muchas veces ha sido una arenga contra lo establecido, una arenga para invitar a la rebeldía, no sé si con éxito o sin éxito.
¿Esto es cómo una especie de "obligación" hacia las nuevas generaciones?
Me interesa mucho el mundo pero sobre todo me interesa que va a ser del mundo que estamos viendo.Lo que va a ser, va a ser lo que sean los herederos. Los herederos lo tienen todo en sus manos, a ellos les parecerá que no heredan nada, pero precisamente es una forma de heredar. Siempre he invitado a los jóvenes a que si no les gusta la decoración de la casa en que viven, empiecen ya a tirar los cuadros por la ventana.
¿Ser filósofo y escritor son cosas diferentes?
No. Hay escritores que escriben de una manera más epidérmica, bella pero más superficial, y hay escritores que calan más hondo. Y me parece que el escritor más verdadero es el que tiene una concepción personal del mundo. Y para eso sí hay que tener un poco de filósofo.
¿Qué tienen tus personajes de tí?
A mi me parece que todo lo que se escribe es un poco autobiográfico, lo que sucede es que no sólo está lo que nosotros hemos vivido. Está lo que estamos contemplando, la vida de los demás, lo que de alguna manera uno ha presenciado. De mi hay personajes que tienen mucho p. ej. Octavio Lerma, el Boabdil, el Séneca,.. pero no se puede decir que sea del todo autobiográfico.
¿Cuál es la regla de tres en el amor?
Es un título que está antes incluso que la novela. Era el intento de compartir el amor con una pareja ya establecida. Me parece que el número de tres, en el amor y en la vida, es un número mágico. Era un ensayo de cómo el amor cabía entre tres en vez de a dos. Pero La regla de tres es aparentemente una regla sencilla, porque si se multiplica, luego hay que estar dispuesto a dividir.
¿Tú crees que el amor ha de romper con esquemas establecidos?
El amor es una reacción antigregaria y el sexo también. La sociedad cree que ordena todo, cree que está todo establecido para que la pareja se una y tenga sus crías y las cuide, y eso no es así. El amor se ha refugiado en la penumbra, en la intimidad, la sociedad no tiene que ver con él. El amor es un fenómeno intransferible, absolutamente íntimo y por lo tanto contradictorio de la sociedad, no va contra ella pero sí al margen de ella.
Has escrito novela, ensayo, teatro, poesía, artículos, has llevado novelas al cine. ¿Te queda algo por hacer?
Pues seguir avanzando en todos los caminos. Porque la vida no me dio opción, me dijo tienes que escribir; a cambio de eso me dio la posibilidad de escribir en todos los géneros literarios. Pero es ella la que manda. No me queda nada por inaugurar, pero me queda todo el camino, en todos los sentidos, por andar. Estoy pensando hacer una recopilación de poemas de amor y publicarlos, saldrá para primavera.
Dices que no pudiste elegir ¿Crees que es tu destino ser escritor?
Absolutamente comprobado. Por vocación, hubiese elegido otro oficio. Como es un destino procuro hacerlo bien, pero no podría dejar de hacerlo.
¿Qué significa ser ecologista?
Significa aceptar lo que soy, es decir que formo parte de una naturaleza y que si el hombre (que es un vanidoso) está en el último peldaño de la escala zoológica, no es para beneficiarse sino para administrar una casa que se ha encontrado y que debe dejar mejor de lo que la ha encontrado.
¿Qué nos dirías para el año que empieza?
Que cada uno sea más él; que se pregunte en esa puerta del 97 ¿quién soy? Se responda y que todo el año lo dedique a avanzar en ese camino de búsqueda y de hallazgo de sí mismo; y que no haya ni un solo minuto que esté vacío de ese afán.
¿Crees en la casualidad?
Creo en algo que nosotros llamamos azar. Pero que está todo preparado, por ejemplo, ese encontronazo del amor a primera vista, no es algo que suceda porque sí. Que nosotros hemos venido caminando hasta llegar a ese punto que está marcado con una crucecita y que la otra persona también va a llegar allí en un momento determinado; como la muerte, como todo lo importante, me parece que estamos siendo conducidos. Y lo importante es que nos dejemos conducir. Eso que nosotros llamamos "nuestra vida" no es verdad, nosotros somos de la vida. Si yo transmito la vida y lo que quiere la vida que yo transmita, entonces estaré cumpliendo mi deber. Es como quien se monta en un taxi y se pone muy pesado, diciéndole al conductor de la vida donde quiere ir. El "taxi" ya sabe donde llevarnos.
La grandeza de Antonio Gala
Por Enrique Cabrera Vásquez
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Nimbado por el aura mágica de sus palabras tiernas y sencillas, salidas de la profundidad de sus adentros; envuelto en el misterio cautivante de su figura carismatica, templada por la vasta concepción filosófica de la vida y de la muerte, nos vino la presencia solemne y gallarda; extraordinaria y majestuosa; infinita e inmensa, del gran Antonio Gala. Prolifero escritor y periodista, hombre de ideas y letras universales. Español y del mundo. Pluralizado y exclusivo; para arroparnos con sus aterciopeladas palabras, hirsutas y sinceras, sin de menos y sin demas. Justa y precisas. Expresada con magistral elegancia; con suma teatralidad dramaturga. Con sencillez hinóptica, con fluidez y soltura subgestiva. Adueñándose del escenario, del auditorio, que quedó anonadado ante el peso moral y espiritual de este solitario hombre que pulvoriza conceptos falsos y estridentes. Que tremolea sin inmutarse la reciadumbre de su enjunta figura. En cada gesto y ademanes; en cada movimiento estilístico con que le imprime fuerza a la entonación melodiosa de su discurso –conferencia, fascinante acentúa la veneración espontánea e instantánea de un público harto de escuchar charles y conferencias cargadas de estereotípos rutinarios, flematicos, gastados por su manoseo y contaminados por su impureza. Frente a él, no hay escape posible, no hay desvaríos fantasiosos ni aburrimiento. El orden de su palabra, la elegancia de su discurso concluyen en un éxtasis de recogimiento y respeto. Hasta el aplaudirlo perturba.
El es la palabra encantada que al escuchar ( desde la primera vez) no queremos que se nos escape; que cese ese ( su) aluvión de pristinas ideas, puras y sinceras. Tan fuera de lo ordinario, de lo común; libre de las ataduras ideológicas y de los apremios políticos. Sólo él puede estar por encima de los Sistemas y de los Estados. De los gobiernos y de los gobernados. Es la expresión gallarda, orgullosa, soberbia, presuntuosa, arrogante y hasta jactaciosa ( a él le cabe y le luce), que se subleva contra los convencionalismos automatizantes que nos atrofian y limitan. Así es la recia personalidad y el hombre social, Antonio Gala. Ese que nos trajo el Seminario Internacional de Comunicación de CODETEL, celebrado del 20 al 24 de febrero, y que concluyó con su portentosa Conferencia de clausura. Ese que nos trajo todo un infinito mensaje real y claro conjugado en el peculiar título , "El mito de la libertad", Por eso nos conceptualizó con honestida, sin ambage ni miramiento, "el hombre no tiene libertad auténtica".
En efecto, Antonio Gala dictó una impresionate Conferencia con el tema "El mito de la libertad", en el referido Seminario dedicado a Don Rafael Herrera.
En ella afirmó la carencia de libertad en el hombre, su condición de sometido a valores y patrones falsos e irresponsables.
"No somos más que seres intercambiables galopando hacia la frustración y la locura", dijo.
Este apasionado cultor de la soledad nos denuncia con crudeza filosófica los andamiajes intrínsecos que se dan en la multimillonaria publicidad y propaganda comercial y política, que nos aleja de la real libertad y nos convierte en seres idiotizados, engreidos, vanidosos, fastuosos, ridículos, rindiéndoles culto al consumismo y al morbo. Seres atrapados por "frases, pensamientos y opiniones pre-fabricadas".
Sólo un alto intelectual con vasta errudiccón teórica y conceptual, con criterios firmes. Filosofo y humanista como Antonio Gala, podía transmitirnos esta verdad tan celosamente ocultada por argumentos tejidos interesadamente por quienes se han propuestos "descerebrarnos".
Gala no es un improvisado. No es un visionario fanatizado catapultador de sacrificios y acciones heróica. Su vuelo ha sido dialéctico; es la resultante de un intrincado proceso caustico y reflexivo. Raúl del Pozo nos dice de él que le enseñó a España a ponerse los pantalones. "Es Antonio Gala, la moneda de un dios arrogante con dos caras, una oculta, pesimista, que dice "no". No a la OTAN, no a la video-guerra, no a la corrupción. Hay otro Gala, anarquista comprensivo, que dice "si"al amor y a la libertad, con un estilo lírico, Juan-romoniano de sensibilidad latina y andaluza".
"El narrador poeta, dramaturgo, conferenciante, de conciencia moral muy despierta, cuando comenta la política es burlesco, gallardo, cáustico. Cuando trata de los sentimientos y de los paisajes, la melancolía o la muerte, lo hace con precisión del hombre que ha vivido todas las pasiones. Pero en los dos Galas, en el agitador y en el poeta, encontramos sobre todo esa belleza conmovedora, que ha sabido conectar con la sensibilidad contemporánea que lo ha erigido como ídolo…"
Así, a groso modo, nos describe Pozo a este formidable pensador español y universal nacido el 2 de octubre de 1936. Licenciado en Filosofía y Letras, Derecho y Ciencia Políticas y Económicas. Con gran vocación cultural y literaria, que ha cultivado todos los géneros literarios: ensayo, novela, poesía, teatro, periodismo, conferencia, guión televisado y cinematográfico.
Autor de Enemigo Intimo (1963), Los Verdes Campos de Eden ( 1963), ganador del Premio Nacional de Teatro, Soneto de la Zubia, Testamento Solsticio de Invierno, Si los Padres Hablaran, Anillos para una Dama ( 1973); Las Citaras Colgadas de los Arboles ( 1974); por Qué Corre Ulises? ( 1975); Petra Ragalada ( 1980); Carmen Carmen, musical estrenado en 1968, etc. Se le debe también el libreto de la ópera Cristobal Colón y adaptaciones teatrales de Claudel, Albee y Ocasey. Sus obras han sido traducidas a las lenguas más importantes. Con su primera novela, El manuscrito Carmesí, ha obtenido el Premio Planeta 1990.
El Gala humanista y poeta más que comprender al género lo evalua; trata de rescatarlo del vórtice de la tecnología nociba e inhumana. Lo reconoce como un todo particular y general, con sus alti-bajas y proceso de etapa en la vida "la más solitaria", "en que es pura esperanza o pura desesperación". En el alto vuelo de su palabra, de su mensaje gratificante que reconforta y reenvindica las ansias libertarias del hombre, nos traza las pautas de la autentica liberación . Esa que no es cupón ni trama . Nos orienta hacia la vía de la salvación, de la "libertad auténtica", la que debe apoyarse en la "personalidad verdadera e irrepetible en cada ser humano".
Nos plantea que el hombre se reencontrará consigo mismo y con la Naturaleza en cuanto Naturaleza deba ser obedecida y no aniquilada. "De esta forma el trabajo se convirtiría en un acto de creación, no en un castigo", dice.
"De esta forma, el amor llegará a ser lo que es: una unión con el otro, una afirmación del otro en uno y viceversa, no en una eliminación de nuestros nombres personales, sino en una captación de ellos".Es esta la síntesis meridiana, sucinta y elocuente de su magno pensamiento poético, filosófico y humanista.
Gala viene a ser el reverso de Krishnamurti, ese otro estupendo pensador espiritual y humanistico que nos diferencia claramente la verdad de la realidad, y nos enrrumba por la delicada pendiente de la reflexión y la meditación, para que procuremos la autoliberación autentica frente a una realidad social traumatizante y contaminada por la descomposición.
Y es que la privilegiada condición de poeta de Gala, le permite ese nivel úunico de superioridad humana, le permite ser dios para encontrarse con el autentico Dios . El desmitificado de los dogmas mitológicos y los ritos estúpidos como absurdos. El Dios libre de contaminación y de ataduras espúreas. El que nos brinda la autentica libertad , surgida del rescate de nuestra voluntad . De la justipreciación de nuestra peculiar condición humana . La que nos separa diametralmente de las ideologías fosilizadas; de los tabues anquilosantes. En encuentro del camino que nos matrimonia aceradamente con la Naturaleza, la única madre de todas las creaciones . He aqui la profundidad de la impronta de Gala . El vuelo indetenible de su infinito pensamiento.
Con Krishnamurdi aprendimos que además de los principios activos del hombre como el temor y el placer, existe el del sufrimiento. Y con Gala podemos objetivizar que lalibertad que nos viene de afuerra , no de nuestra intimidad reflexiva , es un mito. Una prisión. "Y que cuando mayor sea la pérdida de identidad, más profunda y más honda será la exigencia de servidumbre. Porque el hombre actual se pregunta, si no soy lo que los otros piensan, que seré ?. Nadie, nada"
He aqui su anatema cautivante contra la inversión humana y social. El sello gomígrafo de su mensaje revolucionario y subversivo, que se enfrenta a la ideología de la mediocridad, del miedo y los dogmas. Al conservadurismo clerical y religioso y al radicalismo insensato y fascista. Al socialismo caricaturesco y desalmado y al capitalismo inhumano e individualista. Al colectivismo forzado y a la violencia irreflexiva y emocional. Gala, el inmenso Gala, apóstol de la libertad, esa que ha sido malograda en los foros internacionales rindiéndoles culto a los egos torcidos de la bestialidad humana. Con Gala negamos los insípidos criterios conceptuales carcomidos por la barbarie. Con claridad, valentía y seguridad nos orienta para que tremoleemos nuestra voluntad adormecida, indecisa y vacilante. "Para que trabaje y se instale libremente en la vida y produzca su beneficios".
Cual cirujano introduce el bisturi en la profundidad del sentimiento personal para extirpar el cáncer expresado en la falsa libertad; la impuesta por las bayonetas y las bombas. La construida en hoteles de lujos y brindis públicitados. Nos predica la autentica libertad: la que debe surgir de la emancipación de nuestro interior; de nuestra propia liberación espiritual; la que debe surgir del amor por la humanidad y por la madre Naturaleza. Con él iniciamos el camino para procurarnos un auténtico camino luminoso, negando la libertad surgida de los genocidios y los holocaustos. Esa que nos proporciona esta bárbara sociedad conducida por orangutanes.
La exposición clara de su palabra hecha conferencia eletrizó a todo el gran auditorio que nos dimos cita en el confortable y amplio salón Anacaona del Hotel Jaragua, en Santo Domingo, convidados por el Seminario Periodistico Internacional de CODETEL. Y no era para menos; virtió su palabra sin ningún desperdicio propia de un hombre de dimensiones cósmicas, como él. Caló y penetró el hondón del alma humana. Soliviantó nuestra conciencia adormecida y endrogada por los invertidos mensajes pre-fabricados por los actuales regentes del mundo. Su palabra nos estimula a luchar contra el odio y la deshumana competencia consumista. Gala no es un nuevo Mesías, pero si el portador de un rectílineo mensaje crítico , hermoso y dulce que nos llena de satisfación humana. En él se manifiesta una propuesta clara y profunda de libertad y de amor. Es la voz apasionada de un heraldo iluminado que carga con vehemencia contra el muro de la obscuridad para que resplandesca la luz: para que se abra paso la esperanza . Y habrá libertad sin cadenas ni condiciones : sin convencionalismos ni cumplidos hipócritas. Sin precios en oro ni especies materiales. Sólo conquistada con la práctica de la moral y de la decencia. Con el respeto por la condición humana. Esa libertad de la que nos habla Gala surgirá para quedarse siempre. Así será. Así lo desea la humanidad.
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ANTONIO GALA: '' HE APRENDIDO MÁS DEL DESAMOR QUE DEL AMOR Y ESO NO ES MALA COSA''
Periodista:- Una de las constantes de las novelas de Antonio Gala es la invitación a ‘salir del jardín’, ¿seguimos encontrando esa invitación en Los invitados al jardín?
ANTONIO GALA.- En Más allá del jardín, Desideria en La pasión turca , en El manuscrito carmesí, la persona es más real cuando sale de su jardín. Ahora, cuando invito al jardín, no invito al jardín de cada persona, sino al jardín común que es el jardín del amor, de la alegría, de la vida, de la felicidad, en ese jardín estamos invitados, no somos propietarios, quien tenga un jardín propio debe salir de él. A ese jardín del que hablo ahora hay que venir y hay que cuidarlo para que esté en flor el mayor tiempo posible, pues no duramos demasiado tiempo dentro de él.
T.- Me ha impactado la intensidad de las situaciones, la capacidad de ponerse en la piel del otro, de mostrar los sentimiento en tan pocas páginas, ¿estamos ante su obra más fresca, más cercana, más auténtica y más intensa?
A.G.- Mi tradición era escribir teatro. Mis personajes los conocía haciendo cosas que luego no hacían en escena como cortándose las uñas, gruñendo a la mujer o a la criada, siendo antipáticos cuando luego en la obra iban a ser otra cosa. Cuando aparecían en escena les dejaba hablar pues los conocía perfectamente y yo ‘hablaba por boca de ganso’. Aquí hay monólogos, por ejemplo en La penúltima, es la historia de un cura rural, enamorado de su profesión, yo sabía como él era, le puse en una situación y él habló. En ese momento yo me aparto y esa es una de las satisfacciones más grandes que da la creación, y que nada puede ya quitarme.
P.- ¿Por qué ha adoptado el formato de relato en lugar de la novela, su género más habitual desde que en 1990 apareciera El manuscrito carmesí? ¿Es un formato que se adecua mejor a los tiempos de prisas en los que vivimos?
A.G.- El relato es más legible, una historia relativamente corta se lee mejor que una novela larga de las escritas en el siglo XIX, cuando se tenía más tiempo para leer. En este momento la gente lee poco y lee deprisa. Lee en los medios de comunicación, entre viaje y viaje, lee en el avión. Creo que la historia corta es más adaptada y más feliz para esta época. Además mi colaboración diaria en un periódico es siempre muy minúscula, y me ha hecho aprender la síntesis y la sinopsis, las cosas que pueden ser dichas en menos palabras deben decirse con las palabras necesarias y nada más.
P.- ¿Cómo se ha encontrado Antonio Gala escribiendo en este formato?
A.G.- Al cambiar el formato la expresión se ha hecho más sólida, más joven, más rápida, más compañera. Estoy muy contento de este libro, no por el éxito que vaya a tener, pues es algo en lo que no pienso, sino porque me ha proporcionado una gran satisfacción mientras lo creaba.
P.- ¿Existe diferencia para Antonio Gala entre amor y enamoramiento?
A.G.- El amor significa una perduración, aunque luego no dure, pero nace para perdurar, el enamoramiento es una llamada de atención, de él puede nacer el amor, o no nacer, pues puede decaer pasados unos días y se olvida, palidece, y no cuaja en ese sentimiento grande, verdadero del amor.
P.- Los invitados al jardín se estructura como un gran puzzle, casi como un caleidoscopio de situaciones: el amor a destiempo en La Exposición, parejas aparentemente perfectas que se destruyen en Esa bonita pareja, el amor a un objeto en El último coche..., si en algo coinciden es en la tragedia. ¿Forman tragedia y amor un tandem inseparable?
A.G.- Son dos caras de la misma moneda, el amor es eterno mientras dura, pero el amor no dura siempre, como tampoco dura el jardín. Muchas veces los causantes de que no dure somos nosotros, otras veces son los otros, la otra parte de la pareja. Tendemos a mirarnos en el amado o en el amante como si fuera un espejo, pero para encontrar nuestro propio rostro. Esa falta de generosidad hace que el amor decaiga. Entonces viene no sé si la tragedia o la muerte, pero sí el desamor. Yo he aprendido mucho más del desamor que del amor, y eso no es mala cosa.
P.- Antonio Gala se enamora cada día de...
A.G.- Me enamoro casi continuamente de la luz, me ha dado por la luz, por los resbalones que la luz pega. Ahora que acabamos de adelantar esta hora y la luz dura más y toca las copas de los árboles, y nos pone fragante el mundo y llegan las tórtolas a Madrid, que por primera vez he escuchado en mi casa. Los invitados al jardín también son las tórtolas, las urracas, los mirlos, y entonces me enamora la naturaleza.
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